En un contexto internacional complejo debido a la contracción económica mundial que se observa, apoyada en las consecuencias de la pandemia de Covid-19 y la guerra entre Ucrania y Rusia, las exportaciones uruguayas de bienes lograron alcanzar un máximo histórico, y las ventas al exterior de las Zonas Francas significaron el 13,2%.
Asimismo, las exportaciones en estos espacios libres de impuestos —que el gobierno impulsa como los principales puntos de atracción de empresas e inversiones extranjeras— crecieron en un 2% respecto del 2021.
Las exportaciones récord de Uruguay
Sin contemplar las ventas de las Zonas Francas —donde funcionan, por ejemplo, las plantas de celulosa, así como muchas de las empresas tecnológicas extranjeras—, el país acumuló 11.590 millones de dólares en exportaciones durante el 2022, lo que implica un aumento del 18% en relación con el total exportado durante el 2021.
Los principales productos exportados durante el año fueron la carne bovina —a pesar de la caída del sector cárnico durante los últimos meses—; la madera, la soja, la leche en polvo y el arroz; además de la energía eléctrica que continúa mostrando año tras año nuevos máximos. En este marco, la agricultura fue el sector que más aportó al crecimiento de exportaciones durante el año pasado.
Los destinos exportadores
Durante el 2022, China se mantuvo como el principal país importador de Uruguay, con más de 2.750 millones de dólares, un 24% del total exportado.
Brasil y Argentina ocuparon el segundo y el tercer lugar, con ventas por 1.873 millones y más de 1.000 millones de dólares colocados, respectivamente. Dentro del Mercosur, Paraguay fue el siguiente destino en importancia, con exportaciones por 144 millones de dólares. En conjunto, el bloque representó el 30% del total exportado.
Sin embargo, si se considera a la Unión Europea como un bloque, éste desplazó a Brasil como el segundo comprador de Uruguay, con ventas que representaron 1.950 millones de dólares, un 22% más que en el 2021. Del total, el 51% de estas exportaciones pertenecieron a la celulosa, que crecieron un 19%; otro producto en el que se verificó un aumento fue en la carne vacuna con un 18% y la madera con un 8%, teniendo a Portugal como puerto de entrada a Europa.